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Título original: «10 ways to reduce your plastic use»

Título modificado: «10 maneras de reducir tu uso de plástico (y no ser visto como el Grinch ecológico)»

¿Alguna vez has oído hablar de la «basura del séptimo continente»? Es una isla flotante de residuos plásticos en el Pacífico Norte del tamaño de Francia y España juntas. Y lo peor de todo es que esta no es la única isla flotante de basura plástica que hay en el mundo. Según estudios recientes, cada año se vierten en el océano 8 millones de toneladas de plástico. Este es un problema serio, pero no es necesario que te conviertas en el Grinch ecológico que grita a todos que dejen de usar plástico. Sabemos que reducir el uso del plástico no es tarea fácil, por eso, aquí te presentamos 10 maneras divertidas y fáciles de reducir tu uso de plástico sin tener que sacrificar tu estilo de vida:

1. ¡Haz la prueba del reparo!

¿Tienes algún objeto de plástico en tu casa que haya perdido su funcionalidad? En lugar de tirarlo y comprar uno nuevo, intenta repararlo. Puedes usar cinta adhesiva o pegamento para plástico. Si no tienes la habilidad para hacerlo, piensa en alguien en tu comunidad que esté dispuesto a ayudarte.

2. ¿Has pensado en…la bolsa de tela?

Por fin el carrito del supermercado está lleno de alimentos deliciosos, pero antes de que te ilusiones pensando en los gofres que te vas a hacer, piensa en la bolsa de plástico que utilizarás para llevarlos a casa. Intenta llevar tu propia bolsa de tela. Además de ser más amigable con el medio ambiente, ¡también son mucho más resistentes!

3. Lleva tu propia pajita

¿Amas tomar refrescos con pajita? Pues sigue disfrutándolos. Incluso puedes llevar tus propias pajitas. Las de acero inoxidable ya están disponibles en el mercado, son muy duraderas y ayudan a no usar plástico.

4. Adiós, botellas de plástico

Las botellas de plástico son muy comunes en nuestros hogares, pero reutilizar y volver a llenar una botella de plástico puede no ser la mejor opción. Además, aunque las botellas sean reciclables, debemos recordar que el proceso de reciclaje en sí mismo es muy costoso a nivel energética y a menudo no resulta en un producto nuevo de alta calidad. En lugar de botellas de plástico, compra una botella reutilizable de acero inoxidable y llénala con agua directamente del grifo. ¡No sólo reducirás el uso del plástico, sino que ahorrarás dinero también!

5. Adiós, popotes de plástico

Los popotes son un problema para el océano. Dependiendo de la marca y el tipo, algunos no se pueden reciclar y su tamaño los hace difíciles de recolectar y separar del resto de materiales en los vertederos. También son uno de los objetos más comunes que se encuentran en la playa y un peligro para la vida marina. Todo esto para hacer que sea más fácil beber bebidas frías durante un par de minutos. Alternativamente, puedes optar por popotes de papel, de vidrio o de acero inoxidable.

6. Cambiar la envoltura de plástico por papel de aluminio

A veces es necesario envolver alimentos, bien sea para llevarlos al trabajo o para un día de campo. En lugar de utilizar una envoltura de plástico, podemos utilizar papel de aluminio. No sólo es más fácil de reciclar, sino que puedes reutilizarlo varias veces.

7. Practicar «No imprimir»

La impresión innecesaria es un gran problema en muchas oficinas. En lugar de imprimir informes y documentos, intenta enviarlos por correo electrónico o almacenarlos en la nube. Así no sólo se reduce el desperdicio de papel, sino que ayudamos a reducir los costos.

8. Adiós, recipientes de plástico

Algunos alimentos se venden en recipientes de plástico, como salsas, mantequillas y quesos, por ejemplo. En lugar de comprar productos en vasos de plástico, opta por productos de vidrio. De esta manera, podrás reutilizar los envases y también son más fáciles de reciclar.

9. Infórmate y haz un cambio positivo

Conoce la situación actual de la educción de plásticos en tu país. Investiga sobre las leyes de gestión de residuos. Averigua qué alternativas a los productos con plástico están disponibles en el mercado. El hecho de que te informes ya es un gran paso adelante. Si te ofreces a hablar con personas cercanas sobre cómo reducir el consumo de plástico, podrías marcar una verdadera diferencia.

10. Adiós, productos de higiene personal con plástico

El uso de productos de higiene personal con plástico es común en nuestros hogares. Pero ¿por qué no cambiarlos por alternativas más amigables? Como cepillos de dientes de bambú, maquinillas de afeitar de acero inoxidable o biodegradables y botiquines de tela. Son opciones más duraderas y, además, ayudan a reducir la cantidad de plástico presente en el nuestro entorno.

Estas son sólo algunas de las maneras en las que puedes reducir tu uso de plástico y ayudar a mantener nuestros océanos y tierra libres de basura. Recuerda, cada pequeña acción marca la diferencia. Y no te preocupes, ¡tampoco tienes que ser el Grinch ecológico!